El Departamento del Refrigerador Celeste

Me aventuré a remodelar un pequeño departamento en South Beach, Miami. Un edificio viejo y un departamento destruido de 65 metros cuadrados. ¿Cómo lograr un espacio acogedor, abierto y que no perdiera la esencia de la vida en la playa? Rompí paredes y abrí la cocina; para dar mayor calidez puse piso de madera y además forré las paredes de madera blanca. No voy a mentir de que esta idea la saqué de los restaurantes “Pura Vida” que son unas obras de arte. Para dar más luminosidad, incorporé unos espejos imitando ventanas que reflejan la luz que entra. Me llevé, de Chimbarongo, Chile, dos lámparas grandes de mimbre. El gran desafío era cómo darle ese estilo playero, hippie, pero a la vez nuevo. El refrigerador blanco moderno, si bien era funcional, mataba todo mi diseño. Comencé a buscar opciones y llegué a los electrodomésticos SMEG, estilo vintage, pero nuevos y además de colores. Siempre he tenido una fascinación por el color Celeste. De hecho, así se llama mi hija mayor, de ese color es la puerta de mi casa y además el bus escolar también lo pinté Celeste.

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