Patricio Melo
Exbailarín del Teatro Municipal de Santiago por 27 años, rememora su carrera profesional y cómo esta le permitió descubrir el arte y la cultura. También lo determinante que ha sido para desempeñar su actual trabajo como fotógrafo.
Con la convicción que la vida siempre va mostrando los caminos a seguir, después de decidir dejar atrás el ballet clásico a los 42 años, Patricio Melo, retomó la afición por la fotografía, que tuvo desde niño, pero ahora, enriqueciéndola con todos los conocimientos y experiencias adquiridas durante su trayectoria. <<Hoy puedo afirmar que en mi infancia hubo señales muy claras que me mostraban cual sería mi desarrollo profesional a futuro. La vida da muchas vueltas y algunas de ellas, pueden ser muy cortas. La carrera de bailarín es muy breve y uno debe prepararse para el momento en que debe retirarse>>, enfatiza Patricio.
A la hora de recordar sus inicios en la danza, reconoce que nunca le llamó la atención practicarla; sino que llegó a ella por casualidad. Un primo comenzó a tomar clases y él decidió acompañarlo. Unos meses después, dieron el examen para entrar a la Escuela de Ballet del Teatro Municipal. No obstante, solo Patricio fue aceptado.
Instagram @patriciomelofotografia
Fotografía: Patricio Melo